Durante décadas, los mexicanos fueron la mayoría en los cruces ilegales hacia Estados Unidos, pero en la actualidad, los migrantes venezolanos han ocupado ese lugar, según informó la Voz de América.
Según las estadísticas recientemente publicadas, los venezolanos encabezaron la lista de nacionalidades arrestadas por cruzar ilegalmente la frontera de Estados Unidos, superando por primera vez a los mexicanos en el registro histórico.
En septiembre, se registraron 54.833 arrestos de venezolanos por parte de la Patrulla Fronteriza tras ingresar desde México, más del doble de los 22.090 arrestos contabilizados en agosto.
Esta cifra marcó un notorio aumento con respecto al récord anterior de 33.749 detenciones, registrado en septiembre de 2022.
En el mismo mes, el total de arrestos de individuos de todas las nacionalidades que ingresaron a Estados Unidos desde México ascendió a 218.763, representando un incremento del 21% respecto a los 181.084 arrestos registrados en agosto. Estos números se acercaron notablemente al máximo histórico de 222.018 arrestos, reportado en diciembre de 2022, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés).
Por otro lado, se documentaron 39,733 arrestos de mexicanos cruzando la frontera en septiembre, una cifra significativamente menor en comparación con la de los venezolanos. Los guatemaltecos, hondureños y colombianos ocuparon los siguientes puestos entre las cinco nacionalidades con más detenciones, reseñó Telemundo.
En el año fiscal que concluyó el 30 de septiembre, se superaron los 2 millones de arrestos por segundo año consecutivo, lo que representa un 7% menos que el récord histórico de más de 2,2 millones de detenciones registrado en el mismo período del año anterior.
Venezuela, inmersa en una profunda crisis política, económica y humanitaria durante la última década, cuenta con más de 7 millones de personas fuera de sus fronteras. Al principio, muchos se establecieron en países vecinos de América Latina, pero en los últimos tres años, han llegado en gran número e irregularmente a Estados Unidos, estableciéndose en ciudades como Nueva York y Chicago, entre otras.
