El parole humanitario, programa que permite la llegada de venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos a los Estados Unidos y les brinda acceso a permisos de trabajo, cumplirá un año de haber sido implementado el próximo 19 de octubre.
Desde entonces, unos 130.000 venezolanos han ingresado a territorio estadounidense de forma legal, informó recientemente Blas Núñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración en el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
Venezuela es el país más favorecido por el programa, seguido por Haití, Cuba y Nicaragua, en ese orden, aunque se desconocen las últimas cifras por separado.
Las cifras surgen días después del anuncio de vuelos de deportación desde EE. UU. directos hacia Venezuela, una medida que tenía varios años pausada.
Para el Gobierno federal, la intención es empujar a la migración hacia vías legítimas como el parole humanitario y así evitar más cruces ilegales por la frontera sur.
“Seguimos insistiendo que no pongan sus vidas en las manos del crimen organizado, no crucen el Darién de manera ilegal… tomen ventaja de estos canales seguros y ordenados que hemos puesto en vigencia”, opinó Núñez-Neto, quien también destacó la extensión y redesignación del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para la comunidad venezolana en la nación, según informó la Voz de América.